dijous, 24 de maig del 2012

Fantasia en do menor. J.S.Bach

Un homenatge confidencial als companys i companyes de l'Escola de Música Victòria dels Àngels, que m'ha aguantat durant setze anys.




dimarts, 22 de maig del 2012

La educación anula la creatividad

Un chico con una “mano colocada" - aunque se la coloquen en el conservatorio Tchaikovsky, de Moscú- constituye un asesinato. Porque cuando les han colocado la mano, ya les han colocado la cabeza y el oído.


Diario La Gaceta. San Miguel de Tucumán, Tucumán, Argentina. 26/02/2006

PERFIL
ESTADO CIVIL: Está casada con Enrique Gainza, tiene dos hijas, dos hijos y siete nietos.
ACTIVIDAD: En 1951 dejó su Tucumán natal, de donde egresó como licenciada en Química (de hecho, trabajó en el Laboratorio de Físico-Química de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia) y se fue con una beca a la Universidad de Columbia, en Nueva York. Pero no fue para perfeccionarse en Química, sino en su otra profesión, la música. Desde entonces, Violeta Hemsy se especializó en Pedagogía Musical.



[L’entrevista comença amb unes preguntes i respostes relacionades amb el cançoner tucumà sobre el qual hi treballa la Sra. de Gainza]
...
-¿Qué diferencias hay entre una pedagogía musical adicta al sistema, y otra innovadora?
-Una pedagogía musical adicta al sistema no tiene una actitud crítica frente al sistema. Si el sistema le manda un programa con tales y tales características, se responde a esas normas, y se piensa que de esa manera se transformó la realidad. El adicto al sistema está contento porque tiene un puesto. Pero no basta con las formas, con cambiar terminologías, o técnicas superficiales. Los cambios en materia ideológica pasan por la cabeza de la gente, y por las esencias. Una pedagogía que no es adicta al sistema tiene que profundizar en el objeto y en el sujeto del conocimiento. En el caso de las pedagogías artísticas, si la función del arte es permitir que el sujeto se expanda, se desarrolle y que de alguna manera tenga una experiencia de libertad, no me sirve una pedagogía estereotipada .
-¿Por qué hay creatividad en el chico, y después se pierde?
-Porque la educación la anula. Sobre todo en la educación secundaria y universitaria se está fomentando el conductismo, la eficacia, el orden. Y las cosas en orden ya están en internet.
-¿A qué apela una pedagogía musical moderna?
-A técnicas más abiertas. Las pedagogías abiertas creen en el individuo que se tiene enfrente. No es esto de que yo soy el maestro, y le voy a enseñar al que no sabe. La enseñanza, aquí, es mucho más simétrica. Estamos aprendiendo todos.
-¿Cómo se visualiza esto en la enseñanza del piano?
-Tocar el piano es hacer algo con tus manos y con tus dedos en una mesa que está llena de sonidos. Hay dos caminos: que te enseñen cómo colocar las manos y los dedos para sacar las notas, y qué notas y en qué orden. O hacer como hace el nene, a quien el padre lo deja que se alce para hacer sus primeros pasos, y sólo le pone el dedo como referencia. Y es el chico quien va haciendo ese proceso para el cual está programado. Estamos programados para hacer cosas que la educación no nos deja hacer. El maestro sabihondo que va a enseñar a colocar la mano no debería existir.
-¿Qué tiene que hacer un niño con un piano?
-Que haga lo que quiera. Primero, déjalo abierto, y que haga lo que él hace. Y después te incorporás vos a lo que él hace. Vos empezás a hacer lo que hoy sabe hacer cualquier maestra jardinera con intuición: ella interviene en el juego que el chico le plantea.
-¿Por qué en la música es tan difícil?
- Porque la música está en un pedestal. Lamentablemente para la música. ¿Por qué no lo dejan al chico que mueva sus deditos para recién después intervenir? ¿Cuándo interviene el padre para ayudar a su hijo a caminar o a hablar? Cuando ve que el chico está hablando mal, o que no camina. No se trata de que lo haga todo solo, sino de permitirle que saque lo suyo. Un chico con una “mano colocada" - aunque se la coloquen en el conservatorio Tchaikovsky, de Moscú- constituye un asesinato. Porque cuando les han colocado la mano, ya les han colocado la cabeza y el oído. A ese chico hay que devolverle urgente la libertad que le corresponde.


dimecres, 2 de maig del 2012

EL PAÍS "Papá, quiero ser compositor"

“Papá, quiero ser compositor”

Los recortes de la Generalitat ponen al límite las escuelas de música


Cristian González, tocando el piano en su escuela 
de Castellar del Vallès. / ALBERTO ALONSO DIEZ
Cristian González se pone serio al plantarse ante el piano. Acerca el taburete, se sienta y desgrana nota tras nota Para Elisa, de Beethoven. A pesar de sus 11 años, Cristian tiene claro su futuro profesional. “Quiero ser compositor”, asegura sin sombra de duda. Hace ya seis años que estudia en la escuela de música Torre Balada de Castellar del Vallès (Vallès Occidental, Barcelona), empujado por su padre y una genética de tres generaciones de músicos. Este año la familia ha tenido que apretarse el cinturón porque las cuotas de esta escuela han subido un 30% de media este curso. “Continuaremos pagando hasta que podamos”, dice el padre, Ángel González.
Esta familia de Castellar está sufriendo el encarecimiento de los estudios musicales provocado por los recortes de la Generalitat. La enseñanza musical se financia con las aportaciones del Gobierno catalán, los Ayuntamientos y las familias. El Departamento de Enseñanza destinará este año 19 millones a las escuelas de música y danza, el 30% menos que en 2011, cuando se invirtieron 27 millones, y el 36% menos respecto a 2010 (30 millones). El recorte se plasmó en 2011 con el paso de 600 a 460 euros de la subvención que da la Generalitat por alumno y año a las escuelas municipales de música. Para este curso se ha anunciado una nueva rebaja dejará la aportación en 230 euros, aunque la cifra podría modificarse debido al último recorte de 1.500 millones que planea la Generalitat, de los cuales 400 millones podrían afectar a educación.
El recorte está sobrecargando a Ayuntamientos y familias, que también pasan dificultades económicas. Este círculo vicioso está poniendo en poligro la continuidad de los estudios no obligatorios, como los que ofrecen las escuelas de música y danza, pero también las guarderías. “Hay un punto en que no podremos resistir. Esta línea es la que estamos ahora a punto de traspasar”, alerta la Asociación Catalana de Escuelas de Música (ACEM), que defiende estos estudios como un “patrimonio” que fomenta el éxito escolar. “Ayuda al desarrollo de las emociones, de las capacidades motoras, de la imaginación y la creatividad, de la capacidad de aprendizaje…”, defienden desde la ACEM.

Muchas familias no pueden pagar ya los estudios musicales tras el aumento de las cuotas
La entidad ha realizado entre la mitad de los 165 centros de estudios musicales públicos de Cataluña una encuesta que revela los problemas económicos del sector. Según la encuesta, el 53% de las escuelas ha tenido que subir este curso las cuotas un 10% de media. La escuela de Castellar tuvo que ir más allá y subió las matrículas un 30%.
El aumento de precios está provocando que muchas familias no puedan permitirse estos estudios. La encuesta de la ACEM revela que durante este año se han perdido 1.700 alumnos, el 4% de los 43.000 alumnos que estudian actualmente en escuelas de música municipales. También la plantilla se ha visto afectada y se han perdido medio centenar de profesores, el 1,4% de los cerca de 3.300 que trabajan actualmente en estos centros.
La escuela de Castellar también ha notado este efecto. Este curso han perdido el 30% del alumnado (han pasado de 238 estudiantes a 168). También han tenido que prescindir de la profesora de canto, porque han dejado de ofertar esta materia, y han reducido la jornada laboral de algunos maestros. Toni Meler, director de la escuela, apunta que con vistas al próximo curso buscan soluciones para hacer viable el centro, por ejemplo priorizar las clases colectivas (se crearán un grupo de gospel y una coral) y asignaturas populares que puedan atraer a un amplio público.
La ACEM alerta de que hay escuelas de música que no podrán sobrevivir si continúan los recortes de la Generalitat. Maria Antònia Puig, edil de Educación de Castellar del Vallès, califica la situación de “muy crítica y muy grave”, pero asegura que el cierre de la escuela no se prevé. “La escuela sirve de trampolín para los niños que quieran seguir estudios profesionales de música. Si nosotros no hacemos esta tarea, ¿quién la va a hacer?”, se pregunta la concejal. Cristian es uno de esos niños que esperan ver un día sus sueños hechos realidad. De momento, el joven músico aprovecha siempre que puede para enseñar a la profesora sus composiciones. La última, dedicada a su hermano menor con motivo de su onomástica. Cristian practica duro cada día esperando poder dar vida muy pronto a los primeros compases de su pieza favorita: La marcha turca, de Mozart.